El fin de cualquier espectáculo es entretener y si además
terminas disfrutando con lo que te ofrecen, tanto mejor. El que presenciamos
anoche en la sala Garufa cumplía de sobra estas expectativas y a ello contribuyeron,
en la misma medida, tanto el atrás, como
el alante, protagonizado por el baile. Tres fueron los momentos que reseñamos de esta actuación.
La ronda por tangos que protagonizaron Liam Howarth a la
guitarra, Ismael Solomando y Laura Castro al cante y Pablo Núñez a la percusión
daba ganas de levantarse uno del asiento y subirse a participar con ellos.
Ismael dejó una estupenda muestra de tangos extremeños y Laura la completó con los
de Cádiz y algunos otros de los más conocidos de esta frondosa rama del árbol flamenco.
El mejor momento del baile fueron sin duda las alegrías protagonizadas a dúo por David
Serrano y Marta Manzano, con toda la gracia, intención y la viveza que supieron
imprimirles. ¡Lástima que estos “pasos a dos” se prodiguen tan poco!
La guitarra de Liam, apoyada por la caja de Pablo fue el diestro y acertado cauce que
condujo toda la actuación. Es una enorme satisfacción ir siguiendo día a día el
avance y continuo enriquecimiento de estos
artistas. En este caso el toque de Liam va ganando terreno en seguridad,
sonoridad y riqueza en cada actuación.
Eulalia Pablo
