domingo, 4 de noviembre de 2012

Conchita Borrull


 
Conchita da sus primeros pasos junto a su hermana Julia en el Villa Rosa barcelonés. Luego, acompañada por su padre y hermano actúa en el Monte Carlo y Eldorado de Barcelona, en el Romea y Teatro de la Comedia de Madrid y visita Valladolid (Teatro Zorrilla), Toledo (Teatro Rojas), Santander (Gran Casino) y Palma de Mallorca (Teatro Lírirco). Estas son algunas gacetillas que certifican los éxitos que va cosechando en cada local en los que baila:
 
Café Villa-Rosa.—Continúan triunfando, Julia y Conchita Borrull, verdaderos genios del baile gitano y también gitanas por sus hechizos.
Eco Artístico, 25 de marzo de 1917.
 
En este teatro [Teatro Eldorado] se ha presentado Conchita Borrull, hermana de la célebre bailarina Julia. Conchita Borrull es una bailarina de cuerpo entero, que con su primera actuación ha recibido ya el bautismo del éxito.
Conchita es una bailarina españolísima: sus contorsiones gitanas del propio Albaicln y Sacro Monte, sus gestos, su presentación, su arte, todo eso unido a su figura, joven y graciosa, la harán conquistar muy pronto —antes que muchos se figuran— un puesto entre las bailarinas clásicas, entre las buenas, entre las mejores. Los trajes de esta criatura, preciosos y llamando la atención de todo el público, y siendo así, huelga hacer constar que están confeccionados por Pepe Valero, ese tío tan feo que ustedes ven por ahí siempre buscando antigüedades, con los dedos llenos de brillantes, y que si no lo expulsan de Barcelona pronto no habrá dinero nada más que en su casa.
Eco Artístico, 15 de septiembre de 1917. 
 
 
Conchita Borrull acaba de hacer una actuación  de quince días —diez y cinco de prórroga en el elegante Teatro Eldorado, de esta ciudad condal. En ese coquetón teatro, llamado Eldorado, que ocupa parte de la calle de Vergara y plaza de Cataluña, no triunfan todos los artistas, no. El público concurrente es severo y hostil cuando se trata de medianías, pero es agradecido y aplaude cuando se trata de artistas verdad; por eso a nadie ha cogido de sorpresa las ovaciones que ha oído la gitanísima Conchita y la prórroga que la empresa se ha visto obligada a dar, a petición del público, que con sus Interminables aplausos la pedía a diario y en cada sesión en que esta joven artista tomaba parce.
El primer contrato serio que Conchita Borrull ha cumplido ha sido éste de Eldorado. De sus resultados no tendrá queja la graciosa danzarina; público y Prensa, al unísono, han aprobado su labor y han pregonado sus éxitos.
Los éxitos de Conchita Borrull han sido grandes y merecidos, y han sido grandes y merecidos, porque no podía esperarse otra cosa de quien lleva el apellido Borrull.
Miguel Borrull. ese mago de la guitarra, a la que arranca alegrías y sentimientos con sus mágicas manos, ha educado a su hija artísticamente, de tal forma, que no hará nunca el ridículo en ningún teatro que se presente, por importante que éste sea.
Miguel Borrull ha seleccionado para su hija un repertorio de músicas divinas, entre las que descuellan una preciosa serenata de Malatz, que Conchita Borrull borda cuando la ejecuta.
De presentación está la niña como la mejor; ha presentado una colección de trajes de un efecto grande, que el público ha admirado por su confección y gusto.
Como digo anteriormente, ya habrá hecho su presentación ante el público madrileño Conchita Borrull cuando esto se publique, y la habrá hecho nada menos que en el Teatro Romea, en la catedral del género de varietés.
Acompañan a Conchita Borrull a la guitarra su padre y hermano, formando una trinidad de lo que «quea» poco.
Ya tienen las empresas de varietés otro número de los buenos; dos contratos y en dos universidades de primer orden, coma son Eldorado, de Barcelona, y el Romea, de Madrid.
La aparición de Conchita Borrull en el mundo «varietinesco» es un fenómeno astronómico; ya se convencerán las empresas de que es una cosa notabilísima, porque no pasará mucho tiempo sin que sus compañeras hablen mal de ella.
Creedme a mí: aquí hay una Concha que ni la de San Sebastián, con sus chipirones, su bacalao a la vizcaína y sus preciosas bañistas en pleno reinado del traje de dril.
J. M. N.
Barcelona, 21 Septiembre 1917.
Eco Artístico, 25 de septiembre de 1917. 
 
Conchita Borrull, la verdadera reina de las danzas gitanas, que con tan extraordinario éxito ha actuado en el Teatro Eldorado, de Barcelona, y Romea, de esta corte, acaba de obtener un triunfo definitivo en el Teatro Rojas, de Toledo, donde el público y la prensa en general han prodigado a la gran artista los más justos elogios.
Conchita Borrull, que ejecuta con singular maestría toda clase de bailes, tanto españoles como extranjeros, ha dedicado especial atención a las danzas gitanas, a cuyo difícil arte ha consagrado sus grandes dotes y reconocido talento.
Acompañan a la guitarra a la notable artista su padre y hermano, guitarristas eminentes que poseen un repertorio de los más celebrados maestros.
Eco Artístico, 15 de octubre de 1917.
 
Pero tras triunfar clamorosamente en estos escenarios, Conchita cruza los mares y ya nada volvemos a saber de ella.
 
José Luis Navarro