Las Hermanas Borrull, conocidas y anunciadas también como las Egipcias, eran una pareja de baile formada por Julia y Dolores Borrull Jiménez, hijas de Miguel Borrull Castelló. Su trayectoria artística se desarrolló de 1910 a 1912. Durante esos años, actuaron en importantes salones de variedades madrileños (Royal Kursaal, Teatro Madrileño, Parisiana y Salón Madrid), visitaron Málaga (Teatro Lara), Cartagena (Pabellón El Brillante), Barcelona (Teatro Arnau), Lorca (Teatro), Zaragoza (Teatro-Circo), Bilbao (Salón Vizcaya), hicieron una gira por Francia (octubre-noviembre de 1911) y formaron parte del cuadro flamenco de La Feria, el local que Amalio Cuenca abrió en el Montmartre parisino, en donde cautivaron a sus parroquianos.
El Eco Artístico dio cumplida cuenta de esta singular aventura, así como de la importante gira que realizaron por otras capitales europeas (Amberes, Bruselas, Hamburgo, Berlín, Viena e Italia):
El Eco Artístico dio cumplida cuenta de esta singular aventura, así como de la importante gira que realizaron por otras capitales europeas (Amberes, Bruselas, Hamburgo, Berlín, Viena e Italia):
El día 10 del mes actual saldrán para París las notables duetistas y bailarinas Hermanas Borrull, a quienes acompaña su padre, el celebrado tocador de guitarra Miguel Borrull, con objeto de formar parte en uno de los número de inauguración de un lujoso music-hall próximo a inaugurarse en la Ciudad Luz.
Les deseamos que el triunfo sea tan grande como los conseguidos por dichos artistas en España.
Eco Artístico, 5 de abril de 1912.
Otro número español que ha gustado mucho aquí son los Hermanos Borrull, que están cosechando aplausos... y oro. ¡Qué manera de hacer luises! Verdad es que la familia no tiene desperdicio: gana el simpático Miguel Borrull, como «tocaor» y como profesor de guitarra; ganan dos hermanas, como bailarinas; gana la tercera, como «tocaora»; gana la pequeñita, que apenas ha nacido, cantando y bailando... amén de que Julia cobra 20 francos la hora en casa de un pintor famoso (que ha encontrado, según dice, el tipo ideal de la gitana en Julita Borrull) y otros 20 francos por cada lección de guitarra.
Total: según mis cálculos, ¡unos 300 francos diarios! ¡¡Que ya es franqueza!! Verdad es que quizá necesiten todo eso, porque el amigo Borrull no se ha traído más que su mujer, las cuatro hijas, el hijo, la criada, un mono, un botijo y una cazuela grande para hacer arroz...
Se dice... que la casa donde trabajan cambiará de director, por ser éste en extremo antipático a todo el mundo (y si no que lo diga Quinito). Se dice... que tomará este puesto un señor de Cuenca, y que un padre de numerosa familia artística, que está ganando en la misma casa fama y dinero, sería parte en el negocio, siendo por tanto artista y amo. ¡Veremos!
Eco Artístico, 5 de agosto de 1912.
Hermanas Borrull (Egipcias,)
Es una notabilísima pareja de baile que figuró en todos los carteles de nuestros principales Salones, siendo en todos recibidas con ese entusiasmo al que sólo tienen derecho los artistas que valen.
Pero no es sólo en España donde las Hermanas Borrull obtuvieron la sanción franca y halagüeña que su trabajo merece; en el extranjero, su nombre se cotiza a alto precio, y las Empresas solicitan su concurso con vehementes deseos.
En París fueron prorrogadas por dos meses, después de una brillante actuación de tres meses en el mismo Teatro, y, entre otros contratos pendientes, figuran los de Amberes, Hamburgo, Berlín, Viena e Italia.
Pero ¿no está hecha la apología de las Hermanas Borrull con decir que hasta Mayo de 1913 no están libres de compromiso en el presente momento?
Eco Artístico, 25 de agosto de 1912
.
El repertorio de las Borrull estaba formado por lo que en términos genéricos se anunciaba como “bailes gitanos”, aunque ellas gustaban de inventarse números con exóticas denominaciones, como el ya mencionado “baile húngaro” o las “cubanas” [1] —¿unas guajiras?—.
Unas veces bailaban las dos en pareja y otras Lola acompañaba a la guitarra el baile de Julia. También dejó constancia la prensa de su maestría en el manejo de la sonanta.
El repertorio de las Borrull estaba formado por lo que en términos genéricos se anunciaba como “bailes gitanos”, aunque ellas gustaban de inventarse números con exóticas denominaciones, como el ya mencionado “baile húngaro” o las “cubanas” [1] —¿unas guajiras?—.
Unas veces bailaban las dos en pareja y otras Lola acompañaba a la guitarra el baile de Julia. También dejó constancia la prensa de su maestría en el manejo de la sonanta.
Las creadoras del baile gitano, señoritas hermanas Borrull, actúan por segunda vez en Zaragoza, donde son tan aplaudidas como la primera vez.No menos agasajada se ve la notable concertista de guitarra Lola Borrull, que es una maestra consumada.Eco Artístico, 15 de noviembre de 1911.
La pareja se deshace en 1913 —únicamente hemos encontrado una actuación de las dos juntas el 5 de mayo de 1914 en el Gran Teatro de Madrid [2]— y una año después Dolores contrae matrimonio y se retira de las tablas. También lo leemos en la prensa:
En la iglesia parroquial de San Sebastián, de esta corte, se celebró ayer la ceremonia del enlace matrimonial entre D. Alberto Flandorfer y Garagarza y la señorita Dolores Borrull y Jiménez, notable bailarina, a quien los públicos han aplaudido en muchas ocasiones con entusiasmo unánime.Al acto religioso asistieron numerosos invitados, que fueron atendidos escrupulosamente por los padres de la novia, que estaba encantadora.Hacemos votos por la felicidad eterna de los recién casados.Eco Artístico, 15 de enero de 1914.
José Luis Navarro
(Continuará)
[1] Este baile lo anunciaron en la fiesta benéfica que se celebró en septiembre de 1912 en La Feria para recaudar fondos para los damnificados de Bermeo (Vizcaya).
[2] GRAN TEATRO. En la fiesta celebrada en obsequio de los excursionistas italianos tomaron parte las Hermanas Borrull, que fueron aclamadas en sus bailes gitanos, así como el padre, excelente guitarrista que las acompañó con gran maestría.
