La Bienal 2012 se despidió con un tributo a 6 maestros del
baile: Mario Maya, José Galván, Manolo Marín, Matilde Coral, Farruco y Adelita
Domingo. Fue una función amable y cariñosa en la que número a número se
homenajearon a los que en Sevilla han enseñado a bailar y a ser artistas a varias
generaciones de jóvenes.
Rafaela Carrasco, Pilar Ortega, Miriam Conde, Beatriz Santiago, Julia
Acosta, Marco Vargas, Ángel Atienza, Manuel Betanzos, José Luis Vidal, Alejandro
Rodríguez y Raúl Gómez interpretaron Tiempo
de Mario Maya. Su hija Belén, sentada en una silla, se acordó del martinete que
hacía Mario así. José Galván y su hija Pastora escenificaron por soleá
la transmisión familiar de saberes. Rafael Campallo, Adela Campallo, José Luis
Vidal, Francisco Mesa, Alejandro Rodríguez y Juan Aguirre hicieron los tangos
de Flamencos del Altozano de su
maestro Manolo Marín. Rafaela Carrasco, después de unas entrañables imágenes de
Matilde Coral ejerciendo su magisterio, hizo cantiñas. Farruquito recordó por
soleá a su abuelo. Y Merche Esmeralda bailó y cantó un garrotín para Adelita
Domingo. El último número fue totalmente prescindible. Alargó el espectáculo
más de la cuenta y no aportó absolutamente nada.
Foto: A. Asedo. Cortesía de la Bienal |
De justicia es asimismo traer aquí los nombres de todos los
que pusieron el cante y la música de estos números: José Antonio Rodríguez,
Rafael Rodríguez Cabeza, Cano, Jesús Torres, Ramón Amador, Morito, Miguel
Ortega, Antonio Campos, Moi de Morón, Antonio Zúñiga y Polito.
Rafaela Carrasco, como directora del espectáculo, enhebró con
acierto esta sucesión de tributos, pero incurrió en un olvido clamoroso: Enrique
el Cojo. Echamos también de menos algunos otros nombres. El de Milagros
Mengíbar estuvo en la mente de muchos. Sabemos del empeño de Rosalía Gómez
porque ella estuviera, pero la incomprensión y la mala gestión de su
representante nos privaron del placer de verla sobre las tablas del Maestranza.