lunes, 10 de octubre de 2011

Las letras de la mariana

Las letras de esta canción hacen todas referencia a Mariana, un animal amaestrado una cabra que formaría parte de un grupo ambulante de gitanos húngaros. De hecho, hay versiones que comienzan con la letra:

Yo vengo de Hungría
con mi Mariana
me busco la vida

El nombre de este sabio animal se suele acompañar con un extraño “macarrones” y un recurrente “mi alma, te quiero”.

Mariana, macarrones,
mi alma, te quiero

Luego, se le pide que realice pequeños números circenses: subir por una escalera. Lo que en lenguaje metafórico y poético se traduce por:

Sube, sube,  Mariana,
por aquella montañita arriba, sube,

Sube, Mariana, sube
por aquella altita montaña

Sube, Mariana, sube,
la de la barriguita gorda, sube…

Hay versos, también clásicos, que mueven a la compasión:

No pegarle, por Dios, más palitos
a la Mariana,
porque la pobrecita
era manquita y coja

Otras letras asociadas a la mariana son:

Maresita mía de mi alma,
¡qué fatiguitas las que yo estoy pasando
por esta mala serrana!
Sin motivito me está a mí dejando.

Cuándo querrá Dios del cielo
que las pascuitas cayeran en viernes
y la lunita en tu tejao;
y yo en la camita donde tu duermes.

En aquella falsa montaña
donde se crían las amapolas,
pon un letrero que diga:
que viva la reina española.

Así como los remates por tangos:

Salga la luna,
la luna y el sol…

No te pongas tú colorá,
no te pongas de tantos colores,
que me hacías previricar.

Y si quieres que te quiera,
ponme fianza;
que de tu querer
no me fío, entrañas de mi sangre,
porque eres muy falsa.

Si quieres que yo a ti te quiera,
dame doblones,
que son moneditas
que alegran, titi de mis carnes, los corazones.

Debajito del puente
sonaba el agua
y eran las lavanderas,
repuñeteras, cómo lavaban.