COFRADIA CIENTIFICO LUDICA “EL JALEO” PARA EL ESCLARECIMIENTO DEL ENIGMA DE LA BULERIA EN EL CENTENARIO (PROVISIONAL) DE SU NACIMIENTO COMO RECONOCIDO ESTILO FLAMENCO
Manifiesto
Según indagaciones últimas, de momento no alteradas por hallazgo alguno que las invalide; hasta 1910, exactamente el 12 de marzo de 1910, no se reconoce escrita la palabra BULERÍA como estilo flamenco.
Fue en la promoción de lanzamiento de los primeros discos que impresionó Pastora Pavón:
Gramophone – Nuevos DiscosAl igual que Caruso para la ópera presentamos la celebridad mayor para el Canto Flamenco: La Niña de los Peines. Hay que fijarse bien en la invalorable colección de discos impresionados por esta artista, discos que son elogiados incluso por los mismos grandes cantantes de flamenco que reconocen la superioridad de la Niña de los Peines en este arte, por su inimitable estilo. Es poco lo que de ella digamos, restándonos sólo decir que los que sabían que íbamos a impresionar discos de esta artista se anticiparon a pedirnos por colecciones para atender a las demandas que tenían hechas de sus amigos y clientes.(Diario de Cádiz. 12 de marzo de 1910)
No será ocioso recordar que “la Niña” tiene entonces veinte años así de bien empleaos para llegar tan pronto y tan alto. Más aún cuando se descubre que uno de los registros anunciados, el X 5. 530110, contiene y nombra en la circunferencia negra Tientos y Bulerías.
De este modo tan sencillo y expeditivo, trascendente y capital, la Niña de los Peines, o su discográfica, bautizan pa los restos de la vía un cante, un estilo, una forma del género flamenco, de indudable origen grupal, colectivo de palmas a compás, que con el nombre de Jaleo, se ha venido practicando en abundancia por el proceloso siglo XIX.
Lo curioso de la situación es que la palabra bulería es, durante este tiempo, vocablo vivo, ítem más de procedencia gitana, reconocido como tal en los diccionarios de esa época (Véase, por ejemplo, Vocabulario del Dialecto Jitano por D. Agustín Jiménez. Sevilla, 1846.), y para nada relacionado con ningún cante ni cosa que se le parezca: exactamente significa embustería.
Testimonios escritos, tanto en obras literarias como en artículos y gacetillas de periódicos, certifican el uso del término con esta precisa acepción. Miren si no estos ejemplos:
I
Cádiz – Crónica DramáticaEl género andaluz no explotado desde los tiempos de nuestro célebre Castillo, ha vuelto a tomar carta de naturaleza en nuestros teatros, si bien subiéndose a mayores y abandonando los sainetes para alzarse a piezas, lo cual no depende las más veces de cambio esencial sino de algún mayor esmero y variedad en la versificación.Atanacio Benavides y Pedro el Resucitado, primer ensayo dramático de Don José de la Plaza, se haya precisamente en este caso. Lo primero que en él se nota es la apariencia de parodia de una tragedia célebre en algún tiempo, que pusieron en moda el gran Maíquez y sus imitadores, hablamos de Oscar.En efecto, Pedro, que es como si dijéramos Dermidio, tiene aquí su Malvina, que en el barrio de la Viña se llama María, la cual era a su vez galanteada de Atanasio, o sea el hijo de Osián…María no era, afortunadamente, tal cual nos pinta a Malvina el dramático francés, es: insípida, llorona, y amante, no se sabe si de Oscar o de Derminio, porque todo lo parece, sino al contrario: es una viñera que defiende su castidad a puñetazos si es menester, y que requerida de amores por Atanasio, le contesta con estas palabras:María: Endino, te quiés callá. Si no te callas yo misma te voy a rompé la crisma o alargarte una mascá.¿Sabes pa lo que te quiero? ¡Pa esto y náa mas! [escupe y pisa la saliva]Buleropendón, trasto, jarambé, jarapo, chute, manté…Atanasio: ¡Santo Dios, qué aguacero!(Faro Industrial de La Habana. 27 de marzo de 1847)
II
La Feria de SevillaLetra: Teodomiro FernándezMúsica: Carlos Lloréis y RoblesSevilla, 1850.Coro:Ese guisao güelea chamusquina:si el sigarrero vieneva a vé toyina.Pepe:Conqué… no tienes con énaíta? Eso es bulería;como no ha venío otavía…
III
Curro Bulerías
Un mocito sevillano
Con muchísima sandunga
Y con mucho desparpajo,
Alegre, zaragatero,
Rumboso, barbián, simpático,
Galante con las mujeres
Y con los amigos franco;
Pero embustero , y aún más
Que embustero, exagerado
De tal modo, que no habría
Otro con quién compararlo...
(Sevilla. El Progreso. 10 de septiembre de 1893)
IV
FIESTA ESPAÑOLA
Paso a pasito vamos subiendo la cuesta para llegar como mocitos a la cresta.El barrio de San Bernardo será todo lo torero que quieran sus moradores; pero de él han salido todas las bulerías o, por decir mejor, en él se han criado los grandes buleros; y no digo el bulo porque sería hacer notoria injusticia a notabilísimos picadores, banderilleros y espadas también que fueron refractarios a adulterar el toreo privándolo de sus dos puntos ejecutivos: mucho valor y mucho arte…(y se extiende censurando los vicios de la moderna tauromaquia pinturera…)P. P. T.
(Málaga. El Popular.12 de junio de 1903)
V
(El periodista intenta acceder a Pastora para entrevistarla, y cuando le dice una muchacha que Pastora no está, le advierte Pérez Lugín: )
-Que se va a condenar usted por “bulera”, porque estoy oyendo hablar a “la Niña” ahí, en esa habitación.
(Madrid. El Liberal. 13 de noviembre de 1911)
VI
BULERÍAS GITANAS
El matrimonio gitano Rafael Flores Nieto y María Santiago Campos, al par de ser dos tipos de gracia, son dos pillos de siete suelas.El domingo a media tarde algo embriagados se presentaron en la taberna de Antonio Florido, en calle de Refino nº 2, y después de beber varias copas de vino, rogaron al dueño les guardara una guitarra vieja y rota que llevaban.Florido se negó a la demanda de los gitanos, a pesar de la insistencia de éstos, y viendo que no conseguían su objeto marchose el matrimonio con el viejo instrumento, cantando por lo bajini, pero aquí viene lo bueno.Ayer se presentaron los “serranos” en el indicado establecimiento, exigiendo de Florido la guitarra de marras, y como era natural, Florido quedose atónito ante el desparpajo de los cañís, poniéndolos de patitas en la calle.Los gitanos se desataron en insultos, maldiciones y groserías, promoviéndose con tal motivo un fuerte escándalo, y Florido, temiendo quizás las maldiciones, se fue a la Aduana, denunciando lo ocurrido, con el testimonio de varios testigos que se hallaban en el mentado establecimiento el domingo, cuando llegaron los “chistosos” gitanos.
(Málaga. La Unión Mercantil. 11 de junio de 1918)
*****
Sirvan estas antedichas seis muestras seis para demostrar como mucho tiempo antes y aún de mientras y después de que Pastora tuviese la ocurrencia, bulería-embustería estaba en el entendimiento de las gentes.
Siéndolo así, el enigma, la pregunta, es:
¿Cómo es que sabiendo Pastora lo que significaba se atrevió a bautizar su arreglo llamándolo embuste?
La Cofradía Científico Lúdica El Jaleo se constituye pues, para intentar averiguar, en las vísperas mesmas de su primer centenario:
evidencias, motivos, razones y argumentos, de tal nominación; y cómo fue, en aquellos años, haciendo fortuna el redescubierto término, hasta convertirse en universal enteramente, no ya como signo del embuste sino en tanto que forma principal de lo flamenco.