La Sala Garufa se va consolidando como un lugar flamenco. Cada
viernes va aumentando el número de sus habituales. Y todo gracias al buen hacer
de los artistas, jóvenes empeñados en hacerse un sitio a corto plazo en el
panorama flamenco actual.
Anoche le tocó el turno a Florencia O'Ryan. Apellido
irlandés, nacionalidad chilena y sentimiento flamenco. Bailó soleá y taranto
y demostró buena técnica y, sobre todo, pasión por el baile y temperamento y
garra para expresarlo.
Le acompañaron Jesule de Utrera al cante y Fity Carrillo al
toque.
Al final, como suele ser habitual, todos se despidieron con
unas pataítas por bulerías con la participación de algunas amigas presentes en
la Sala.
Texto y fotos: José Luis Navarro